Es jueves 21 de marzo. Agotados pero felices volvemos en el tren desde Santiago de Compostela a Madrid. Unos hablan, otros dormitan, pero todos tenemos fresco en la memoria el recuerdo, que promete ser imborrable, de una semana que ha pasado más rápido de lo que esperábamos, mucho más deprisa de lo que hubiéramos querido.

Ya salimos de Madrid con las expectativas bien altas. El propósito, unirnos a la tradición milenaria de una peregrinación a la tumba del apóstol Santiago. Durante esta semana hemos podido experimentar en nuestras propias carnes en qué consiste el Camino, y andar es la menor de las tareas.

Durante estos días ha flotado en el ambiente el deseo de profundizar en el encuentro con uno mismo, con los demás y con Dios y, de alguna manera, cada uno hemos podido lograr estos objetivos. Hemos tenido tiempos de reflexión que, unidos a experimentar nuestros límites en el cansancio, nos han ayudado a conocernos más a nosotros mismos.

Ser conscientes de que lo que estábamos realizando era una peregrinación, especialmente en el tiempo de Cuaresma, nos ha hecho mirar a Santiago y la resurrección como la meta del Camino, la meta de nuestra vida. Cada día, cada etapa nos hemos sentido acompañados por Dios, y hemos podido celebrarlo por todo lo alto en la Catedral.

Desde el primer momento hemos experimentado una convivencia muy estrecha. Albergues y comidas, cansancio y descanso, conversaciones y silencios, y risas, sobre todo muchas risas. Lo hemos compartido todo, y eso nos ha unido de una manera muy especial.

Lo que comenzó siendo un grupo escolar caminando, se ha ido transformando en una familia que palpita al unísono. Por encima de las diferencias naturales, compartir el objetivo, compartir el sufrimiento y la alegría, compartir la fe… en definitiva, compartir la vida, ha hecho que cambiemos la mirada de unos a otros, creando una hermandad nueva; y la mirada hacia la vida que nos pide que vayamos siempre más allá.

Ultreia et suseia!

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Reflexiones en torno al Camino de Santiago 2024, realizado por alumnos de 4º ESO del 14 al 21 de marzo